El fingolimod es el primer fármaco oral aprobado para la EM. No obstante, teniendo en cuenta que es un fármaco relativamente nuevo, ha habido algunas dudas acerca de su seguridad.

Una publicación reciente del profesor Montalban y otros expertos en EM de todo el mundo, determinaba la seguridad y eficacia del fingolimod tras siete años de investigación de seguimiento, a raíz de una extensión de un ensayo clínico con 250 personas con EM remitente-recidivante.

Los resultados de este estudio demostraron que recibir tratamiento de fingolimod durante más de siete años está relacionado con una menor inflamación de la enfermedad, sin ningún otro problema de seguridad.

A largo plazo, la enfermedad inflamatoria sigue siendo baja con el tiempo, como se confirma por el reducido número de recidivas y lesiones nuevas que aparecen en la IRM.

La evolución de la discapacidad también fue baja durante el estudio de extensión y la tasa de encogimiento cerebral (atrofia) fue menor de lo que se esperaría en personas con EM no tratadas.

En general, los resultados de seguridad se ajustaban al perfil de seguridad bien establecido de fingolimod visto en los ensayos anteriores. El fingolimod se toleró bien y el tratamiento de fingolimod a largo plazo estaba relacionado con pocos indicios de IRM y clínicos de nuevas inflamaciones.

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