Las neuronas pueden compensar los efectos de los daños provocados por la EM. Esto significa que la evolución de la EM depende, de forma indirecta, de ciertas neuronas que existen incluso antes del inicio de la enfermedad. Si hay más neuronas al principio, el cerebro puede tardar más en deteriorarse y mostrar signos de evolución de la discapacidad física. Este fenómeno es conocido como reserva cerebral y depende del volumen de todo el cerebro.

En este estudio, un grupo de investigadores de los EE. UU. estudió el volumen cerebral de personas procedentes de Serbia que padecían la enfermedad, descubriendo que aquellas personas con un crecimiento cerebral mayor a lo largo de la vida, lo cual está indirectamente relacionado con el volumen cerebral, tenían menos probabilidades de presentar discapacidad a los cinco años del seguimiento.

En futuros estudios, deberá investigarse si los efectos del crecimiento del cerebro bastan para ser utilizados en las prácticas clínicas.

Lea el artículo completo (la página web externa se abre en una nueva ventana).

Page Tags: